lunes, 1 de abril de 2024

Versión Campusa de "Las Señas del Esposo" o "Estaba la Catalina"

Hacer participe, Transmitir, Difundir, Exponer, Distribuir, Poner en común, dar  lo que se tiene para disfrute de todos. En definitiva, Compartir, es lo que quiero hacer, en este día tan especial.

Tres hojitas de Aurel

Aunque solo sea en contadas ocasiones, el arduo trabajo de la investigación histórica y su redifusión te da pequeñas satisfacciones, que de algún modo compensan el tiempo invertido, en esta ocasión es la prestigiosa revista “Ritmo” la que al hacerse eco de la IX convocatoria del Concurso Internacional Amadeus de Composición Coral (CIACC) me llena de satisfacción, al ver el nombre de Villa del Campo asociado al popular romance “Estaba la Catalina” (téngase en cuenta que en lo referente a Extremadura el citado Romance suele ir ligado a Arroyo de la Luz), en esta ocasión el profesor y director del coro Amadeus de Puebla de la Calzada, Alonso Gómez Gallego, lo asocia con Arroyo de la Luz y Villa del Campo.

No deja de ser cierto, que al comienzo de los años 30, del pasado siglo, Kurt Schindler,  compositor Americano de origen alemán, realizó una grabación de este tema, en Arroyo de la Luz, y que años más tarde en 1952, el también americano Alan Lomax grabó el tema y posteriormente fue publicado en “The Spanish Recordings: Extremadura”.

Entre tanto el musicólogo placentino Manuel García Matos, realiza grabaciones y recoge datos por la alta Extremadura, de cuyo trabajo saldrán, “La Lírica Popular de la Alta Extremadura” y “El Cancionero de la Provincia de Cáceres”, en este ultimo, se incluyen cuatro versiones de “Estaba la Catalina”, “Las Señas del Esposo” o “Las Tres Hojitas de Laurel” (de las tres formas es conocido el romance) y es aquí donde la versión de Villa del Campo aparece íntegramente y por delante de las demás versiones, cuando García Matos, presenta la archiconocida versión de Arroyo de la Luz, lo hace como referencia “B” al tema 15, que es la versión de Villa del Campo, y en la nota “19” indica que sigue igual que la versión de Villa del Campo, y señala que a modo de estribillos interiores del romance, entre los versos se intercala y “¡viva el amor!” y “¡viva el andén!”. Posteriormente cita como “C” una versión de Descargamaria idéntica a la de Arroyo, para finalizar con la versión de Robledillo de Gata, citándola como “D” que es parecida a la de Villa del Campo.

Es de sobra conocido que las canciones coplas o romances, de tradición oral, no suelen ser de nadie, surgen de la voz popular, y como tal el viento las esparce aquí y allá, el pueblo las toma y adapta como suyas, y ya nadie sabe de donde vienen, ni adonde irán.

La carencia del sentido lógico suele ser habitual en canciones y romances  y en no pocas ocasiones la costumbre hace que apenas se noten o nos fijemos poco en ellas, la temática de las cuatro versiones, recogidas en el citado Cancionero de Cáceres, viene a ser la misma, pero con pequeños detalles que las hacen peculiares, en la primera versión, la Catalina está a la fresca, sentada en un verde Aurel, con los pies en la frescura, viendo las aguas correr, esto denota cierto sentido ya que el Laurel requiere frescura para crecer, la versión Arroyana sitúa a la Catalina sentadita en el andén, (según García Matos, ídem en la versión de Descargamaria) sin embargo en la versión de Robledillo de Gata, la acción se sitúa en el portal de la casa, y el nombre de la dama es Blanca, (esta versión viene a estar en consonancia con la esplendida interpretación de Acetre Folk Bilingüe https://www.youtube.com/watch?v=r_4CFIZKwcE  recogida en Olivenza, y muestra una vez más la riqueza del folklore, que ofrece versiones idénticas en localidades alejadas, obviando las más cercanas a su natural entorno) en ningún caso la Catalina se percata de la presencia del marido, no lo reconoce ni se extraña de que la llame por su nombre sin conocerla, ya que lo que esta en juego o se pone en valor, es la lealtad o fidelidad de Catalina, no es de extrañar que en ocasiones se sustituyan o añadan palabras sin sentido que busquen la rima, ya sea asonante o consonante.

En el segundo verso de la versión Arroyana que recoge García Matos, el andén remplaza al laurel, y se mantiene en los correspondientes estribillos,  tal vez sea una errata de Matos ya que tanto la versión que recoge Kurt Schindler en torno a 1930 como la recogida por Alan Lomax en 1952, en ese segundo estribillo se cita y ¿viva el laurel! sin que esta palabra se encuentre en el romance y carezca del sentido amoroso que tiene el primero.

En esta versión Campusa que destaca García Matos, muy armónica y compensada, se aprecian detalles personales, pequeñas pinceladas propias de la informante que imprime su sello personal, en esas voces tan particularmente Extremeñas que García Matos recalca, Faustina Sánchez Alonso, se mete en el personaje de Catalina, y dicta su propio estilo, no es Catalina quien dice Aurel, usté, lao, o casá, es ella la que habla imponiendo su propio estilo, demostrando que vivía y sentía el folklore. En dicha versión el Aurel es utilizado con doble sentido, primero como un lugar fresco y agradable, donde pacientemente espera Catalina y más tarde, entre las señas del esposo, aparecen las tres ramitas de Aurel, símbolo de buena suerte, el esposo regresa sano y salvo de la guerra y Catalina ha sido fiel.

Se desconoce porque Kart Schidler y Alan Lomax, no citan esta versión Campusa, sobre todo Alan Lomax, que en 1952 coincidió con García Matos en el Festival Folklórico de Palma de Mallorca, donde el americano grabó el ramillete de interpretaciones, las únicas en las que se puede escuchar al maestro placentino interpretar pindongos y paloteos, interpretados a flauta y madera ya que a falta de tamboril, el maestro golpea sobre una madera (posiblemente una mesa) y que produce esa extraña sensación de hacerlo sobre el aro del tambor.

Ante lo expuesto, sobran razones para defender los méritos de esta desconocida versión que merece ser citada y puesta en su justo valor.

                                         Estaba la Catalina o (Las Señas del Esposo)

Versión recogida en Villa del Campo por Manuel García Matos a Faustina Sánchez Alonso. Canción numero 15 del Cancionero Popular de la Provincia de Cáceres de Manuel García Matos, Melodía 33.

Estaba la Catalina
sentada en el verde aurel
con los pies en la frescura
viendo las aguas correr.
Pasó por allí un soldado,
un soldadito del rey.
- Dios te guarde, Catalina,
- Dios le guarde a usté también.
Oiga usté mi buen soldado,
que pregunta quiero hacer.
¿Ha visto a usté a mi marido,
que es soldado como usté?
- Si usted me diera las señas,
quizás le conoceré,
- Mi marido es alto y rubio,
alto y rubio como usté,
en el puño de la espada
lleva señas de marqués,
en el lao derecho lleva
todas las armas del rey,
y al otro ladito lleva
las tres hojitas de aurel.
- Ese soldado, señora
días ha que muerto es.
Yo me hallé en el testamento,
y en el entierro también,
y quedo en el testamento
que me case con usted.
- No lo quiera Dios del cielo
ni lo permita la ley
que mujer de mi linaje
se vuelva a casá otra vez,
una hija moza que tengo,
monja la pienso meter,
y un hijo mozo que tengo,
al rey se lo entregaré,
el padre murió en la guerra,
que muera el hijo también.
- Calla, calla, Catalina,
y mira y fíjate bien,
yo soy tu esposo amado
y tu eres mi esposa fiel.

                                                                                                               E, Moreno.

                                                                                                          Madrid 1 de Abril de 2024 

martes, 12 de marzo de 2024

La Feria del Campo, todo un referente



Victoriano Gutiérrez como Alguacil, Damas de honor, Presidente y Tamborilero oficial 1977. Foto de Olga Gutiérrez
Hermosa fotografía y no menos hermosos rostros de Campusas que hacen honor y dan credibilidad a la importancia comarcal de la feria. Foto cedida por Mariluz Gutiérrez y coloreada por Julián Nevado.

Villa del Campo, Toros, Feria de San Bertol 1974. Foto de Olga Gutiérrez.


El 28 de Agosto de 1964, en la sección “Vida en la Provincia” pagina 9, mediante uno de sus corresponsales residente en Pozuelo de Zarzón, el Diario Católico “Extremadura”, Como notas de actualidad, informaba del éxito de la tradicional feria de ganado que habían tenido lugar en el inmediato Villa del Campo, el corresponsal, además del éxito en las transacciones de ganado, elogia las fiestas a las que desde tiempo inmemorial con mayor intensidad concurren los forasteros y aprovecha para mencionar a un gran numero de paisanos que desde diferentes puntos de la geografía patria, acudieron a las fiestas del citado Villa del Campo, y termina indicando que aunque en aquella localidad no era fiesta religiosa pensaban consumir allí con sus familias, sus permisos veraniegos, lo cual leído entre líneas, viene a decir que la Feria y Fiestas del Campo era el mayor atractivo.

1977, foto centrada en Alguacil y Presidente

Entrada de Rafael Nevado.

No es que fuera nada nuevo, era lo habitual en el entorno, pero viniendo de Pozuelo, es un gran elogio.



Debido a la dificultad que puede entrañar la lectura del periódico en que fue publica, se transcribe íntegramente el texto.

 Extremadura: Diario Católico Año XLI Nº 13.050

28 de Agosto de 1964

Con motivo de las tradicionales ferias de toda clase de ganados que se vienen celebrando en el inmediato pueblo de Villa del Campo, a la que han concurrido un extraordinario numero de cabezas de ganado vacuno, lanar, cabrío, caballerías etc. y nos consta que se ejecutaron muchas transacciones y cuyas fiestas desde tiempo inmemorial tienen lugar con mayor intensidad y concurrencia de forasteros en éste, hemos tenido el gusto de saludar:

A nuestro querido amigo, teniente auxiliar de construcciones y electricidad, con residencia en Madrid, don Jesús Muñoz Camino, su distinguida esposa doña María Paz Sánchez Gil y sus hijos José, María Jesús y Marcelino que se encuentran en esta disfrutando sus vacaciones.

A don Justo Pereda. Domínguez, sargento del Regimiento de Infantería La Victoria, 28, de Salamanca y su esposa doña María Luz Gil Ruiz.

A don Antonio Paule Martín, sargento de Artillería con residencia en Madrid el que en fecha próxima contraerá matrimonia con la gentil señorita María de los Ángeles Ruiz Corchero.

Al secretario del Ayuntamiento de Jarandilla, don Francisco Sánchez Martín, su distinguida esposa, doña Araceli Simón Paule y su simpático hijo Carlitos.

Al sargento de la Guardia Civil del puesto de Peraleda de la Mata, don Andrés Paule Marcos, esposa doña Josefa Paule Marín e hijos.

A don Gervasio Font Plaza, cabo de la Policía Armada, con residencia en Gerona y su simpática esposa deña Isabelita Altuve.

A Rafael Tome Martín y su esposa Petra Amores, que residen en Francia. A Felipe Morcillo Simón y su esposa Eugenia García, que se encuentra, en ésta disfrutando unas vacaciones procedentes de San Sebastián.

A Eugenio Simón Marcos y su esposa Laudelina Sánchez  Peñasco, residentes en Alemania.

A Juana Roncero Silicio e hijos procedentes de Bilbao.

A José Gil Simón y su hijo José Luís, residente en Baracaldo.

A Zacarías Alonso Pulido, residente en San Sebastián.

Y otros muchos más, los cuales y a pesar de no ser una fiesta religiosa en esta localidad, pretenden consumir en ésta con sus familiares sus permisos de verano.



jueves, 7 de marzo de 2024

El Oro de Villa del Campo

 


1936 El Oro del Campo

Lejos de las cuestiones políticas, que las tiene y muchas, el hallazgo y elaboración de esta relación, ha supuesto para mi una gran satisfacción, la mención de tanta gente conocida me retrajo, tantos y tantos momentos, vividos junto a personas, que por naturaleza se han ido olvidando, entre estas personas están mis tres tías carnales, por otro lado, está la entrega y valía de un noble pueblo, que rebuscando en sus escasas pertenencias, encuentra cientos de piezas de oro y las entrega a la causa circunstancial en la que se ve envuelto, la extensa relación viene a dar suficientes pistas de los ornamentos o aderezos, habituales que complementaban la indumentaria local, también deja claro, que el oro más usado era de 14 quilates (oro bajo), a pesar de que son documentos de acceso publico y que en su día fueron publicados en un determinado medio de la época, y que cada cual, es muy dueño de defender sus intereses e ideales, tras un análisis preliminar, y a pesar de que la mayoría de las donaciones las entregaban mujeres que apenas sí habían participado en política, se descarta poner los nombres de las personas donantes, ya que en un reciente pasado, algunas de estas personas, jugaron un importante papel no acorde con la situación de aquel 1936, llama mucho la atención la fecha de las donaciones, apenas tres meses del alzamiento militar y por tanto la zona quedaba en la llamada zona nacional, sin la opción o posibilidad de elegir.

Lejos de las posibles interpretaciones ideologías, en su integridad original, el documento es muy valioso, ya que aporta nombres y apellidos de más de un centenar de mujeres, que por su actividad cotidiana no aparecen en otros documentos.

VILLA DEL CAMPO 5, 6, y 8 de Octubre de 1936

Relación de las alhajas entregadas para la Suscrición Nacional en oro a disposición de la Junta de Defensa Nacional de Burgos, por los vecinos del pueblo de Villa del Campo, que a continuación se detallan: Por evitar posibles roces ideológicos se suprimen los nombres de las personas donantes y solo se indica lo entregado por cada cual.

El cuerpo de abajo de un pendiente, oro bajo.

Un pendiente de oro bajo.

Tres cuentas de gargantilla y un pendiente de oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla, oro bajo.

Catorce cuentas de gargantillas, oro bajo.

Una venera, un par de pendiente y dos trozos de oro bajo.

Un par de colgantes de unos pendientes, oro bajo.

Diecisiete cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un colgante y asa de un pendiente, oro bajo.

Una gargantilla, y ajustador de oro de ley, un par de pendientes y dos colgantes de pendientes de oro bajo.

Un par de pendientes, rotos de oro bajo.

Una gargantilla de oro bajo.

Un par de pendientes de oro de ley,

Tres cuentas de gargantillas de oro bajo.

Un pendiente de oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantillas y el colgante de un pendiente, oro bajo.

Un cordón con colgante de oro de ley y un ajustador de oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantillas, oro bajo.

Un par de pendientes y un pendiente suelto, oro bajo.

Una cruz de oro bajo.

Un colgante de pendiente de oro bajo.

Un par de pendientes de oro bajo.

Doce cuentas de gargantillas, oro bajo.                    

Un colgante de pendiente de oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla de oro bajo.

Tres cuentas de gargantilla de oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Seis cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes uno de ellos roto, y un colgante de gargantilla, oro bajo.

Dos cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un ajustador de oro bajo.

Dos cuentas de gargantilla, de oro, bajo un trozo también de oro bajo y un asa de pendiente de oro de ley.

Dos colgantes de pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes de oro bajo.

Un pendiente de oro de ley.

Un colgante de pendiente y siete cuentas de gargantilla de oro bajo.

Tres cuentas de gargantilla, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro de ley.

Un par de pendientes uno de ellos roto de oro bajo.

Un pendiente de oro de ley.

Un par de pendientes, oro bajo.

Dos colgantes de pendiente de oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro de ley.

Un pendiente roto, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro de ley.

Tres cuentas do oro de ley.

Dos colgantes y dos cuentas de oro bajo.

Un pendiente y una cuenta de oro bajo.

Dos pendientes rotos de oro bajo.

Ocho cuentas y una argolla de oro bajo.

Dos colgantes de un par de pendientes de oro bajo.

Un par de pendientes de oro bajo.

Dos colgantes de pendientes de oro bajo.

Dos colgantes de pendientes de oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Tres cuentas de gargantilla, oro de ley.

Dos colgantes de unos pendientes de oro bajo.

Cinco cuentas de gargantilla, oro de ley.

Un par de pendientes de oro bajo.

Un colgante de un pendiente de oro bajo.

Dos sortijas de oro de ley.

Dos colgante de pendientes, oro de ley.

Un portarretrato, ajustador partido y un alfiler de corbata, oro de ley.

Un par de pendientes, una cadena de oro bajo y una, cruz rota de oro de ley.

Una gargantilla con colgante, un una sortija de niña partida, de oro de ley y una cadena, de lentejuelas con colgante, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro bajo.

Un trozo pendiente de oro bajo

Un par de pendientes, una sortija y un asa de oro de ley.

Tres cuentas de gargantilla de oro de ley.

Un par de pendientes de herradura, otro par de pendientes arpofares, los colgantes de un par de pendientes, un pendiente suelto, una gargantilla sin cruz, varias cuentas de gargantilla, una venera, tres trozos de pendientes, dos trozos de sortija de oro de ley.

Una gargantilla de oro bajo y venera de oro de ley.

Una cruz de oro bajo.

Una cadena de lentejuelas con cruz, una, gargantilla con cruz, un ajustador de oro bajo y un par de pendientes, otro par desigual de oro de ley.

Un par de pendientes rotos de oro de ley.

Una gargantilla de oro bajo.

Un par de pendientes de oro bajo.

Los colgantes de un par de pendientes, oro bajo,

Un par de pendientes de oro bajo.

Un par de pendientes rotos de oro bajo.

Un par de dientes rotos de oro bajo.

Un alfiler, una gargantilla con colgante de oro bajo, tres pares de pendientes, una cadena con dos colgantes y dos sortijas de oro de ley.

Cinco cuentas de gargantilla, de oro bajo.

Los colgante de un par de pendientes de oro bajo.

Los colgantes de un par de pendientes de oro bajo.

Tres cuentas de gargantilla de oro bajo.

Cuatro trozos de  pendientes de oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla de oro bajo.

Dos colgantes de pendientes de oro bajo.

Un par dependientes un colgante de un pendiente y tres trozos de un galápago, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes de oro bajo.

Dos cuentas de gargantilla, y un pendiente, oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla de oro bajo.

Un par de pendientes de oro bajo.

Una gargantilla con cruz oro de ley un par de pendientes, una venera de oro bajo.

Una gargantilla y un par de pendientes de oro bajo.

Una gargantilla de oro de ley, dos pares de pendientes de herradura uno de ellos roto de oro bajo.

Una gargantilla, unos pendientes y un ajustador de oro de ley.

Un pendiente, oro bajo.

Una, gargantilla oro de ley y un par de pendientes abrillantados, oro bajo.

Unos pendientes, oro de ley.

Una gargantilla con cruz, oro bajo y dos pares de pendientes, oro bajo.

Una gargantilla oro bajo.

Una gargantilla, oro bajo.

Una gargantilla, un par de pendientes y un ajustador, oro bajo.

Una gargantilla, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro pajo.

Cinco cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Una, gargantilla con cruz, un ajustador, dos pares de pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes y tres trozos de pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes y una cadena, oro de ley.

Dos pares de pendientes, oro bajo y una gargantilla, oro de ley.

Once cuentas de gargantilla, oro bajo.

Una gargantilla, oro bajo.

Una cadena de lentejuelas con cruz y dos pares de pendientes, oro bajo.

Dos colgantes de pendientes, oro bajo.

Una cadena de lentejuelas, oro bajo, y un sello, oro de ley.

Dos ajustadores, una, sortija con piedras, una, gargantilla con medalla, una esclava, un pendiente, oro bajo, un ajustador y un sello de niña, oro de ley.

Un colgante roto, cuatro pendientes, dos sortijas y tres trozos, oro de ley.

Un par de pendientes de herradura, oro bajo.

Un par de pendientes, oro de ley.

Un par de pendientes, oro bajo.

Una gargantilla y un par de pendientes, oro bajo.

Una gargantilla, oro bajo.

Un pendiente y parte de otro oro bajo, cuatro media cuentas de gargantilla y un colgante, oro de ley.

Una gargantilla, oro bajo.

Tres cuerpos de pendientes y diez cuentas de gargantilla, oro bajo.

Dos cuerpos de bajo de pendientes, oro bajo.

Un galápago, oro bajo.

Cinco cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Los cuerpos de abajo de un par de pendientes, oro bajo.

Los cuerpos de abajo de un par de pendientes, oro de ley.

Un par de pendientes, oro bajo.

Ocho cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes y una cuenta de gargantilla, oro bajo y otra de oro de ley.

Un par de pendientes, oro bajo.

Los cuerpos de arriba, de un par de pendientes, oro de ley.

Cuatro cuentas de gargantilla, oro bajo.

Dos pares de pendientes, oro bajo.

Un pendiente y dos cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla, oro de ley.

Los cuerpos de abajo de un par de pendientes, oro bajo.

Una cruz de gargantilla, oro bajo.

Cuerpos de abajo de un par de pendientes, oro de ley y dos cuentas, de gargantilla, oro bajo.

Un pendiente de lazo roto y una cuenta de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes de herradura, oro bajo.

Seis cuentas de gargantilla, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes rotos, oro bajo.

Cuerpos de abajo de unos pendientes, oro bajo.

Un par de pendientes, oro bajo.

El cuerpo de arriba de unos pendientes, oro bajo.

Un trozo de gargantilla, oro bajo.

Cuerpos de abajo de un par de pendientes y seis cuentas de gargantilla, oro bajo.

Los colgantes de unos pendientes de vela, oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla, oro bajo.

Los colgantes de unos pendientes de vela, oro bajo.

Los colgantes de un par de pendientes, oro bajo.

Cuatro cuentas de gargantilla, oro bajo.

Don Felipe Gordo Rodríguez y don Juan Antonio Manzano, miembros de la, junta Auxiliar de Villa del Campo, hacen constar que las alhajas comprendidas en la presente relación arrojan un peso total de ochocientos tres gramos (803) de oro y doscientos noventa y dos gramos (292) de oro de ley, que en bloqué han sido entregadas en la Caja, de Ahorros y Monte de Piedad de Cáceres, según resguardo numero 1.135, fecha de hoy. Cáceres, 17 de septiembre de 1936. Felipe Gordo y J. Antonio Manzano.

A todo esto habría que sumar las 25 pesetas de oro que Don Felipe Gordo Rodríguez había depositado en la sucursal del banco de España de Cáceres, el 19 de septiembre de 1936.

                                                                                                                                  E. Moreno

viernes, 19 de enero de 2024

San Sebastián Valeroso

Imagen de San Sebastián, Iglesia Parroquial “Nuestra Señora de los Ángeles” (Villa del Campo)

Foto cedida por Antonio Pariente Gutiérrez

San Sebastián valeroso,
vecino de la laguna,
oye cantar a las ranas
entre las doce y la una.

Hermosa imagen de San Sebastián, aunque libre de ataduras, cumple plenamente con los cánones establecidos, en torno al santo, cuerpo y tronco parecen fusionarse sin necesidad de ligaduras, y siguiendo la característica icnográfica de la mano derecha levantada, a la vez que fija el brazo en el tronco, la mano sujeta la corona que lo muestra como santo.

Detalle brazo derecho

San Sebastián fue un soldado romano, (la graduación varia según las fuentes) que ayudaba y alentaba a los cristianos encarcelados, y ejercía el apostolado entre sus compañeros, fue denunciado y Diocleciano que lo apreciaba, le obligó a escoger entre su posición militar o su fe religiosa, eligió su fe y el enfurecido Emperador, mandó que muriera asaetado. 


La iconografía moderna, muestra al santo imberbe y semidesnudo, aunque no siempre fuera así, otra de sus características es su composición corporal atlética, unido a su resistencia física, valor y entrega, entre otros, es considerado, patrón de los atletas.

Relativamente tiene pocas saetas, y quizás tenga algo que ver, con que San Sebastián no murió asaetado, aunque lo dieron por muerto, sobrevivió al martirio, tras la recuperación no huyó y sin dudarlo, se presentó ante el Emperador Diocleciano, reprochándole su conducta de persecución a los cristianos, enfurecido Diocleciano, mandó que lo apalearan hasta morir y esta vez los soldados cumplieron a rajatabla la orden. 

Detalle brazo izquierdo

Hoy día, este santo, patrón de innumerables localidades, está un tanto olvidado en Villa del Campo, pero en un tiempo no muy lejano, contaba con una ermita compartida con el también Mártir San Fabián, ubicada en el alto de las eras, motivo por el que cobra sentido la alusiva coplilla de las ranas, aunque hoy día, tanto la ermita como la laguna han desaparecido. En torno a su ermita el 20 de Enero, se celebraban grandes fiestas de carácter caritativo, sufragado por la Cofradía de la Misericordia, como era habitual estas cofradías y ermitas, edemas de los cofrades, solían contar, con propiedades que aportaban ciertos beneficios y con ellos mantenían el culto y las tradiciones, las progresivas desamortizaciones fueron acabando con las remesas y con ellas desaparecieron muchas ermitas y cofradías, caritativas. (Entre otras, la Cofradía de la Misericordia tenía como instituto y cargas servir a los pobres, tanto locales como forasteros, en sus enfermedades y necesidades, así como darles cristiana sepultura a cuantos sin caudal muriesen en la jurisdicción de la Villa).

Así pues sabemos que San Sebastián tenia ermita y dotación, que es muy festejado en pueblos cercanos y de la tradición que existía en Villa del Campo el día de su festividad, cada 20 de Enero, la Cofradía de la Misericordia solía gastar más de 200 reales de vellón, en dar a los pobres una libra de pan, un vaso de vino y un poco de queso, y que con anterioridad gastaban una vaca entera que consumían los más necesitados, también se sabe que en la ermita había misa, y procesión, y que estas costaban 23 reales de vellón entre el cura y el sacristán, y que cuando ya no pudo celebrarse la misa en la ermita por hallarse derruida, la celebración se continuo celebrando en la Iglesia Parroquial. 

                                                                                         E. Moreno

                       Rockville. Maryland, 4 de Enero 2024