viernes, 27 de septiembre de 2013

Ultima Hora

Última hora en Villa del Campo: Hallada la mala sentencia que alude la canción, por la que el pago del Zanco pasa a Pozuelo. Se trata de una sentencia ejecutoria litigada por Felipe II, (tras el acogimiento en la villa a su esposa, el fogoso monarca nos salió rana) datada el 5 de Octubre de 1591, en la que sale favorecido el ya difunto Conde de Osorno García Fernández Manrique, señorío de Galileo, sobre el concejo de Villa del Campo, y su consorte Santibáñez, Orden de Alcántara .

Extracto de la sentencia


jueves, 26 de septiembre de 2013

Sellos de Tinta

                        Sellos de tinta Constitucionales, del Ayuntamiento y Alcaldía de Villa del Campo. 
El motivo por el cual hoy podemos contemplar estos sellos se debe a una iniciativa del que fuera director del Archivo Histórico Nacional, Francisco González de Vara, para lo cual, el 1 de Agosto de 1871, solicitó el director de Instituciones Publicas, que hiciera las veces en el Ministerio de Fomento, para reunir replicas de los sellos de tinta de la época, a fin de completar la colección de sellos medievales.
Aprobada la iniciativa, se solicita a las instituciones y corporaciones, Civiles Militares y Eclesiásticas, copia de los sellos utilizados, tanto en huso como los anteriormente utilizados que conservaran, cada una debía remitir impresiones en tinta de sus sellos, se recibieron unos 15.000, que se guardan en la sección de Sigilografía.
Los sellos son una permanente fuente de consulta en la heráldica municipal, para la creación de nuevos escudos municipales.

martes, 10 de septiembre de 2013

Reunión de Quintos, 1947 - 48

























Llegado el día señalado, a la hora convenida, y bajo un sol de justicia, los quintos del 47-48 como los mejores tiempos tomaron la calle llenándola de alegres y tradicionales acordes, amenizados por Pepe y su acordeón, no fueron muchos los que formaron la matinal comitiva festiva, el día iba a ser muy largo y a ciertas edades no están los cuerpos para muchos trotes, (téngase en cuenta que quienes organizaban el evento tienen 65-66 años) aun así, sin dar la nota, se hicieron notar, animando el matutino chateo (o tomar las once, que normalmente termina a las tres).





Tras la comida casera y sin tiempo para la no menos tradicional siesta, arranca la segunda parte del programa, (ahora le dicen hoja de ruta) el grupo ya es muy numeroso y la amenización corre a cargo de algo mas llamativo y bullicioso como es una charanga, ni que decir tiene que cumpliendo con la tradición, cantando y bailando recorrieron las calles y plazas de la villa derramando y sembrando sobre ellas el amplio y rico repertorio local, (quien siembra y abona, tarde o temprano recoge frutos) la tradición manda que el quinto más joven, es el encargado de llevar la bota, (en la ocasión a falta de bota fue un cubo con sangría) la labor recayó en Eusebio "el mocho" que vino desde Francia ex proceso a la fiesta.

El desgaste físico obliga a reponer fuerzas con una reparadora y suculenta cena en casa de Ángel, (buen anfitrión para tan excelentes comensales) tras la cena y contradiciendo el dicho de “al baile, al baile, que la barriga vacía no la ve nadie” en el propio recinto prosiguió la velada con baile, para la ocasión se contó con un hombre orquesta que causó el delirio de los asistentes, y a la tenue luz de las estrellas, finalizó la velada cuando estas ya languidecían.
Todo un gran acontecimiento, surgido de un simple pretexto.

Moraleja, cualquier motivo es bueno para organizar una fiesta.

                    Ajenos a los cerebrales, durante las celebraciones se oyó que eran los quintos ricos, nada más lejos de la realidad, un simple repaso al álbum fotográfico, revela que entre los asistentes había gente de distintas capas sociales.

                                    Álbum Fotográfico











Fotos cedidas por, Rafael Nevado.