Como puede apreciarse es la misma foto que Domínguez Penis colgo en facebook, sigue siendo gentileza suya, la diferencia es que esta, al ser descargada contiene tres veces más resolución y por consiguiente los detalle se aprecian mejor.
viernes, 20 de junio de 2014
Iglesia desde los olivares. Obra de Francisco Domínguez Penis
Como puede apreciarse es la misma foto que Domínguez Penis colgo en facebook, sigue siendo gentileza suya, la diferencia es que esta, al ser descargada contiene tres veces más resolución y por consiguiente los detalle se aprecian mejor.
Tal como eran
Fotografía tomada por Don Tomás Pizarro, en torno a 1984-85, la fecha aproximada la marca Ángela, nacida en 1982 y en la foto podría tener 2 o 3 añitos. |
La foto de identidad propia, gran arraigo y fuertes vínculos de unión con la tierra natal, muestra una estampa generacional, no muy acorde con un tiempo en él que ya efervescian las nuevas tecnologías y por tanto nuevas formas y diferentes comportamientos oteaban el horizonte, por fortuna el paisaje aún no había cambiado y se mantenía con la misma sencillez y funcionalidad que había sido creado y los personas posan con naturalidad absoluta, sin tapujos ni recelos, tal y como eran (hoy nadie se prestaría a fotografiarse así) laborioso, pacientes y generosos, valores de antaño en los que las tolerantes relaciones de convivencia, tenían cabida tanto de puertas a dentro como hacia afuera.
Una treintena más tarde, tanto el paisaje como las costumbres,
hábitos comunes y personales han cambiado tanto que apenas si son reconocibles,
las ahora inmaculada calles apenas si se usan, no tienen vida propia, todo
parece de adorno, (de que sirve tener un elegante y cómodo sofá si no puedes disfrutarlo
tumbándote en el) tan solo los indispensable, ruidosos y
contaminantes, nuevos cocos (niño no salgas a la calle que te puede pillar un coche)
moran en ellas, hoy nada se tolera o comparte, cada cual vive dentro de su
casa, del vecino nada se sabe, la frialdad y el alejamiento reinan e imperan
por todas partes, es impensable ver un corro de mujeres zurciendo sentadas en
torno a las puertas o que los niños tomen las calles, que tiren tiesos en las
casas o hagan una inmensa hoguera con ramas de olivo en el alto de la Iglesia , nadie soportaría
el enorme griterío de sus juegos colectivos, ni que tiraran piedras y palos a
tejados y puertas, ni ver en sus jalbegadas fachadas estampado grandes pegotes
de barro, ni tantos y tantos atropellos infantiles tan comunes en otros no muy
lejanos tiempos, en los que sin más se podía mandar a alguien a buscar moitos
con un costal o a por el molde de los buñuelos.
Poco o nada queda de aquel arraigo, salvo algunos desmotivados vínculos y la fotografía que seguirá viva, dando testimonio a quienes ya no están con nosotros (la mitad ya han fallecido) con su marcha se perdió una forma de vida, ellos eran de escasas pertenencias, de manos abierta y dispuestas, de sus bolsillos o faldriqueras, (faltriqueras) salían pequeños tesoros que hoy con la abundancia nadie sabría apreciar, (si ante ti, alguien metía la mano en su bolsillo o faldriquera, estabas de suerte, siempre te caía algo) nosotros quienes cometíamos los citados atropellos y recibíamos los pequeños tesoros, en conjunto estamos llenos de puertas adentro y vacíos hacia fuera, no nos apoyamos ni nos fiamos de nadie, somos indiferentes a los problemas ajenos, intolerantes, egoístas e insolidarios, más dispuestos a cerrar el puño que a extender la mano.
Fotos de Don Tomás Pizarro Jimenez y Julián Gil Nevado
Poco o nada queda de aquel arraigo, salvo algunos desmotivados vínculos y la fotografía que seguirá viva, dando testimonio a quienes ya no están con nosotros (la mitad ya han fallecido) con su marcha se perdió una forma de vida, ellos eran de escasas pertenencias, de manos abierta y dispuestas, de sus bolsillos o faldriqueras, (faltriqueras) salían pequeños tesoros que hoy con la abundancia nadie sabría apreciar, (si ante ti, alguien metía la mano en su bolsillo o faldriquera, estabas de suerte, siempre te caía algo) nosotros quienes cometíamos los citados atropellos y recibíamos los pequeños tesoros, en conjunto estamos llenos de puertas adentro y vacíos hacia fuera, no nos apoyamos ni nos fiamos de nadie, somos indiferentes a los problemas ajenos, intolerantes, egoístas e insolidarios, más dispuestos a cerrar el puño que a extender la mano.
Fotos de Don Tomás Pizarro Jimenez y Julián Gil Nevado
jueves, 19 de junio de 2014
Las mil paginas del BLOG
Un grano no hace granjero, pero ayuda al compañero.
Muchas candelillas hacen un cirio pascual.
Cada día un grano y harás un montón.
Ochavo a ochavo, se junta un ducado.
Grano a grano allega para todo el año.
Muchos pocos hacen mucho.
Grano a grano, hincha la gallina el papo.
Muchas candelillas hacen un cirio pascual.
Cada día un grano y harás un montón.
Ochavo a ochavo, se junta un ducado.
Grano a grano allega para todo el año.
Muchos pocos hacen mucho.
Grano a grano, hincha la gallina el papo.
De pequeñas minuencias que unidas hacen mucho, está lleno el
refranero, cualquiera de ellas cabría aplicarse al blog, palabra a palabra se fueron construyendo
paginas, unas más, otras menos pero todas relacionadas
con el Campo, su historia, sus gentes, su entorno, costumbres y tradiciones, sin apenas darnos cuenta fueron creciendo y creciendo, (como lo hacen los hijos) el pasado día 4 de Marzo, con la incorporación
del Pleito del Zanco se superaron las 1.000 paginas y más de 750 imágenes
que las ilustran, sin duda algo impensable, sobre lo que parecía tan insignificante,
curiosamente en la pagina 1.001 ironías del destino, se narra la búsqueda del
dudoso documento de fatal resultado para el Campo.
Gracias a quienes colaboraron, aportando sus granos de arena,
que hoy son sólidas piedras.
jueves, 12 de junio de 2014
Breve reseña de las falsas o medias verdades influyentes en la sentencia del Zanco
Suscribirse a:
Entradas (Atom)