No hay mal que cien años dure,
ni cuerpo que lo resista, reza el sabio refrán castellano.
Como las cosas de esta vida,
todo tiene un principio y final, este comenzó en 2007 y acaba en este 28 de
Diciembre, han sido seis años de continuo trabajo y plenas satisfacciones, de los cuales me llevo más que he dado, por tanto he de estar agradecido, no
es fácil seguir en la brecha tanto tiempo, con un tema tan exiguo como este, tras
tanto tiempo, es lógico que la gente se canse, basta con comprobar el escaso o
nulo interés que hoy despierta, si cien años de lucha, en la que se refleja la
propia identidad, por defender un pedazo de tierra como es el Zanco, no ha
despertado el más mínimo interés del pueblo, es que no hay nada que pueda
interesarle.
E. Moreno